Doctrina

Nuestra Doctrina

La Iglesia Bíblica Misionera la Gracia es una comunidad que esta basada en las escrituras como fundamento de nuestra fe, creemos que ella es suficiente ante todo asunto de nuestra vida y que solo allí podremos hallar la vida eterna, por ello creemos en las doctrinas de la gracias, que se encuentran claramente sustentadas en su palabra.

Creemos en la palabra "soberanía de Dios" quiere decir "controlar todo". Esta doctrina significa que Dios controla todo lo que pasa. Indica que toda la realidad es la consecuencia de decretos divinos hechos en la eternidad antes de la creación del mundo. Creemos que la caída de Adán causó la pérdida de todo poder espiritual que podría contribuir a la salvación. El pecado infecta todas las partes del ser humano y lo esclaviza. Ello muestra que la voluntad del pecador es incapaz de escoger a Cristo, producir fe salvadora, o hacer alguna cosa que le guíe a la salvación, hasta que la gracia de Dios le alcance.

Creemos que Dios requiere que la justicia absoluta de la ley sea cumplida en los Cristianos. El no acepta menos que la perfección. ¿Cómo pues, es posible ser justo delante de Dios, sabiendo que no podemos cumplir con la ley? Cristo cumplió la Ley como nuestro sustituto. Cuando nos acercamos en arrepentimiento y fe y creemos en Cristo, Dios nos atribuye a nosotros la justicia perfecta de Cristo, quitando nuestros pecados. Creemos que la gracia es algo sorprendente que no podemos entender con nuestra mente finita, como algo basada enteramente en la voluntad soberana divina y misericordiosa de Dios y no como respuesta a algo que el hombre piensa o hace, permite a unos hombres acercarse por fe a Él para ser hechos hijos suyos, aunque es deber de todo hombre acercarse a Dios, por que el que se acerca a él no le hecha fuera.

El sacrificio de Jesús es la única causa eficaz de la salvación. La crucifixión no solamente proveyó la salvación, sino que la cumplió. Aunque el sacrificio de Cristo en la cruz es suficiente para salvar. La cruz, no la voluntad humana, es la causa de la fe, la obediencia, la buena voluntad y la seguridad eterna de sus hijos) Cristo murió, no para dar una mera posibilidad de salvación, sino para garantizar la certeza de ella para todos sus hijos.
La Iglesia de Cristo es un organismo invisible, no una organización visible. Se compone de todos los elegidos de toda la historia. Es universal en el sentido de que la espiritualidad del cuerpo de Cristo y de la comunión que los elegidos tienen unos con otros, traspasa todos los límites de las diferentes culturas y edades La misma gracia que nos eligió y salvó, también nos preserva hasta el fin. Por medio de exhortaciones, amenazas y reprensiones paternales, Dios preserva a sus elegidos de manera que ninguno de ellos se perderá.